Los hombres fresquitos

Cuando ya llevabamos como una semana en la residencia llegaron. Con sus frigorificos, estereos, microondas, banderitas para personalizar el cuarto y pelos en la cara. Eran los hombres fresquitos. The "fresh men" es como llaman aqui a los estudiantes de primer agno. Aunque los diccionarios, en su arcana sabiduria, recomendaban traducirlo como "novato" (mentira, no lo he mirado ni na. Si alguien tiene la insolita oportunidad de verme buscar en algun tomo por orden alfabetico, descubrira que no conozco el orden del abecedario -aunque puedo engagnar a todos recitando una cancion que aprendi en 5 de EGB-). Pues haciendo gala de idiosincrasia linguistica (si, aqui tambien tengo un acento "muy bonito" y me hacen hablar solo por oirlo -esto no les ocurre ni a los estudiantes franceses ni a los alemanes, ni a la croata, ni a ninguno de los asiaticos...-), me empegne en que yo, y todos a mi alrededor, los llamaramos "frescos", "los frescos" o "los refrescos". Tiene algo de gracia y esa connotacion positiva de "nuevas energias".

Un consejo: no os dejeis embaucar por las connotaciones positivas. Los ahora conocidos como "hombres fresquitos" deben su nombre al importante hervor que necesitan para llegar a ser "adolescentes a temperatura ambiente". Enseguida observamos curiosos comportamientos. Grupos de mujeres mas fresquitas -en todo hay grados- tocaban a la puerta. Tras el desconcierto que les suponia que les abriera un segnor (usease, yo), entonaban su cancion "holaaa, mi nombre es Ridi..." "y mi nombre es Susy" "yo no se que voy a estudiar..." "y yo tampoco" "dormimos en la habitacion X" "pasamos para decir holita". En tendi porque en algunos paises meten en la carcel a los que follan con ellas (o se las follan. Porque, en este caso, el matiz no esta claro). En comparacion, nuestras hermanas pequegnas son el oraculo de Delfos.

Lo que tienen las diferencias de genero (desde que estudio Woman and society estoy mucho mas feminista): Ellas no molestan mucho y hacen bonito (hasta que empiezan a gritar por la alegria de encontrarse, por que se les ha caido un diente de leche o porque se han hecho un tatuaje). Con ellos la cosa cambia. Lo de los pelos en la cara ya lo doy por perdido. No hay quien les convenza que Hugo Boss es un hortera y no necesita cruzar la calle o mirar la pizarra. Concentro mi lucha (sin exito) en que se encajen las gorras en la cabeza. No se quien ha sido el rapero del mal. El caso es que la gorra hacia atras esta pasado, la mas reciente -e incomoda- gorra hacia los lados o las diagonales, tambien. Lo que hacen es que se la meten lo suficiente para que no se caiga, pero procuran que sobresalga lo mas posible (no fuera a ser que su oligofrenia ganada a pulso desde los ocho agnos pasase desapercibida). Hagan la prueba en sus casas si tienen un gorra a mano (o cualquier sombrero) y comprueben el efecto estetico... sobrecogedor verdad?. Los de la gorra, como los que te gritan desde el coche en marcha o los que estrellan botellas de fanta contra muros y suelo para ver como sale la espuma disparada, conforman una inmensa minoria de lo que podriamos llamar "hombres congeladitos" ("froze men"), que no son otra cosa que hombres fresquitos con una catatonia mayor de la habitual. Por suerte solo son el 10% entre semana y el 30% los fines.

Pero no generalicemos. Hay honrosas excepciones. Los hombres fresquitos de mi pasillo pasaran a ser considerados personas (se lo montan bien y tienen bicis y ponen musica buena) en cuanto aprendan 1) que el cuarto de bagno que compartimos los cuatro no se limpia solo (aunque esto a mi me da como igual) y 2) que la lista de lugares adecuados para correrse esta limitada a: un condon, una novia con pildora o un papel higienico y que el colador de pelos de la ducha no forma parte de ella (a no ser que lo limpien ellos). Si, ademas, se quitan los pelos de la cara, prometo invitarles a algo. Otra honrosa excepcion es un autoproclamado hombre fresquito, que viene de NY y es compi en la clase de psicologia social y en taekuondo. Por su comportamiento y expresiones, dudo que sea un verdadero hombre fresquito (es probable que haya trasladado el expediente o algo asi -aunque se le ve jovencillo-). Un ultimo caso: el otro dia una chica me dijo "he, tio, quieres un cigarro?". Tenia largas rastas, lobulos de las orejas dilatados porque se ponia los pendientes dentro de ellos (y no alrededor como es costumbre), sentido del humor y sentido comun. "No me creo que tu seas una de esas mujeres fresquitas" y dice la tipa "yo tampoco".